Al pie de Sierra Nevada, mirando hacia el Mediterráneo, se extiende una tierra que durante más de ochocientos años fue morada de los musulmanes.
Esa tierra es la Alpujarra, un pequeño rincón del Reino de Granada que aún conserva casi intacta la impronta islámica, un pedazo de Oriente en el extremo de Occidente.
Casas encaladas de forma cúbica, cultivos en bancales, pueblos tendidos en las laderas de las montañas, increíbles paisajes y un amplio abanico de posibilidades de ocio.
Con una indiosincrasia peculiar, reflejada en su arquitectura popular y en los modos de vida de sus habitantes, la Alpujarra se nos muestra como un lugar variopinto y diferente, de marcado carácter rural y a la vez abierto y hospitalario, acostumbrado a recibir visitantes de la más diversa procedencia.
Recorrer a pie La Alpujarra a través de los senderos que atraviesan la comarca es una de las mejores maneras de conocer a fondo cada uno de sus bellos rincones.